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La encuesta de Las Rehoyas empieza a
arrojar luz sobre las preferencias de los
vecinos. Con el 60% de la consulta
procesada, se estima que uno de cada
tres vecinos quiere irse del barrio pero
solo si el destino alternativo les
convence.La mayoría de los quieren salir
prefieren la zona del Negrín para
mudarse.
Javier Darriba - @DarribaJavier
Las Palmas de Gran Canaria
En torno a un 70% de los vecinos a los que afecta el plan de reposición de Las Rehoyas prefiere quedarse en el barrio, cambiando su
viejo piso por una casa nueva. En cambio, uno de cada tres residentes aceptaría irse, siempre y cuando la ubicación de su nueva
vivienda les satisfaga.
Los resultados del cuestionario que el Ayuntamiento está realizando entre los vecinos empieza a mostrar las preferencias de los
2.500 propietarios sobre los que se ha planteado el plan de reposición. Con el 60% de las respuestas escrutadas, se concluye que un
80% de las familias está a favor de la renovación del parque de viviendas, mientras que un 8% estaría en contra. Otro 5% aceptaría el
cambio de casa por casa «si no queda más remedio».
Así lo explicó ayer el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste, en el transcurso de un
pleno en el que se aprobó, con los votos a favor de PSOE, LPGC Puede, Nueva Canarias y PP, y la abstención de Ciudadanos y Unidos
por Gran Canaria, la continuación de la tramitación del plan parcial de rehabilitación Rehoyas-Arapiles con el procedimiento que
establece la Ley del Suelo, que es más rápido porque tiene menos controles autonómicos.
Doreste aclaró que entre los vecinos que prefieren marcharse, el edifico planeado en la calle Doctor Alfonso Chiscano Díaz, cerca del
hospital Negrín, es el que acapara todas las preferencias. Se trata de un conjunto de cuatro bloques en los que se proyectan 152
viviendas junto a la carretera de Chile. «También tienen aceptación el edificio del parque -que se levanta en un lateral del espacio
verde y que obliga a quitar un campo de fútbol- y el de Tamaraceite Sur -cerca del intercambiador de Cruz del Ovejero-», explicó el edil
de Urbanismo. En cambio, la propuesta de León y Castillo -en la trasera del Aguadulce- «no la quiere nadie».
Estos datos se conocieron tras una discusión que Doreste mantuvo con el portavoz del PP, Ángel Sabroso, a raíz de la tramitación del
plan. El edil popular criticó al grupo de gobierno por «no gastar ni un céntimo» de los cuatro millones de euros que tiene el
Ayuntamiento para el plan de reposición desde fines de 2017. Y lamentó que «la única propuesta es recortar el parque de Las
Rehoyas y construir un bloque de 160 viviendas a costa de un campo de fútbol».
Doreste insistió en que no se recorta el parque porque lo amplía hacia el interior del nuevo barrio reconfigurado.
Fuente:
Encuesta en La Provincia que habla de los que sí saldrían del barrio (solo para suscriptores):
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